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Día Mundial de la Diabetes

¿Qué operación mejora la diabetes? ¿Quiénes son los candidatos?

  • Se calcula que hay 422 millones de adultos con diabetes en el mundo. Se estima que en 2040 la enfermedad afectará a 642 millones de personas.
  • Gracias a la cirugía metabólica se observa una remisión de la diabetes en más del 80% de los pacientes.

 

En España, más de un 13% de la población padece formas de intolerancia hidrocarbonada, una alteración en el metabolismo hidrocarbonado que constituye una situación previa a desarrollar diabetes mellitus. La diabetes mellitus (especialmente la tipo 2) es una de las enfermedades crónicas más
importantes en el contexto actual. Se calcula que hay 422 millones de adultos con diabetes en el mundo. En los últimos años los casos de diabetes se han multiplicado y, en la actualidad, 1 de cada 11 personas padecen esta enfermedad. Se estima que aproximadamente 642 millones de personas presentarán diabetes en el año 2040, de manera que es considerada como la “epidemia del siglo XXI”, no únicamente por la alta prevalencia entre la población, sino también por los posibles riesgos que conlleva para el paciente. Según la FEDE (Federación de Diabéticos Españoles) más de dos millones de personas en España presentan “diabetes oculta”, es decir, no saben que son diabéticos.

La OMS afirma que, a nivel mundial, más de 3,7 millones de muertes son provocadas por la diabetes y una glucemia elevada. La mejor manera de controlar esta enfermedad es llevar un control exhaustivo de la misma y como medidas generales es recomendable mantener una alimentación saludable, hacer ejercicio físico, evitar ganar peso excesivo, controlar la glucemia en caso de duda y seguir los consejos médicos.

En el ámbito de la cirugía, la diabetes tipo 2 ha supuesto una revolución en la cirugía digestiva, apareciendo un nuevo concepto denominado cirugía de la diabetes o “cirugía metabólica”. Tiene como finalidad la mejoría de la expectativa y la calidad de vida de los pacientes con diabetes mellitus tipo 2. En un 70% de los pacientes diabéticos tipo 2 se asocia esta patología a la obesidad, pero en el 30% restante no se da esta circunstancia.

Precisamente, la cirugía metabólica va dirigida a este 30% de pacientes, ya que el tratamiento del paciente diabético que además presenta obesidad
se enmarca dentro de lo que conocemos como cirugía de la obesidad o “cirugía bariátrica”.

Según el Dr. Alberto Diez-Caballero, especialista Cirugía General y Digestiva del equipo de Quirúrgica Cirujanos Asociados, “la cirugía de la diabetes surgió gracias a la evaluación de pacientes que padecían obesidad mórbida y diabetes, y que se sometían a cirugía bariátrica. En estos casos, se constató una normalización de los niveles de azúcar en sangre mucho antes de una bajada significativa del peso. Esto era debido a los cambios metabólicos surgidos en el paciente tras la cirugía realizada para perder peso”. 

La cirugía en el paciente diabético es una cirugía técnicamente compleja y no exenta de riesgos por lo que debe realizarse dentro de equipos multidisciplinares. Un adecuado estudio del paciente ayudará a una correcta indicación terapéutica y a un mejor resultado médico-quirúrgico. “La cirugía laparoscópica permite la realización de cualquiera de las técnicas que hoy en día se emplean siendo nuestra habitual forma de proceder dada la gran experiencia de Quirúrgica en cirugía metabólica por laparoscopia y en otros procedimientos por laparoscopia avanzada como la cirugía bariátrica.

La cirugía mínimamente invasiva (laparoscopia) nos permite simplificar el curso postoperatorio, mejorando el confort y reduciendo el tiempo de hospitalización sin comprometer los resultados esperados tras la cirugía” señala el Dr. Diez-Caballero.

Una revisión sobre distintas técnicas quirúrgicas de cirugía metabólica para el tratamiento de la diabetes tipo 2 en individuos con IMC <35kg/m 2 documentó una “resolución de la diabetes” (definida como la no necesidad de medicamentos al menos durante 6 meses) en el 89,1% de los pacientes con IMC entre 30 y 35kg/m 2 y en el 81,8% de los pacientes con IMC ente 25 y 29,9kg/m 2 . En el resto de los casos se produce una mejora del control de la glucosa precisando o menos medicación o fármacos orales en lugar de insulina.

El resultado ideal de la cirugía bariátrica/metabólica sería la normalización del estado metabólico sin necesidad de fármacos en un individuo con una diabetes previamente mal controlada con la utilización de insulina. Aún cuando este resultado no se logra en el 100% de los pacientes, la mejoría del control metabólico y de la hiperglicemia con un menor requerimiento de medicamentos puede ser considerado como un éxito de la cirugía.

Reconociendo que la cirugía no cura la diabetes y que esta última es una enfermedad crónica, en la segunda conferencia de consenso de la Cirugía de la Diabetes (DSS-II) realizada en septiembre de 2015 se aceptó colocar a la cirugía dentro del algoritmo general de tratamiento de la diabetes y recomendó considerar este enfoque para los pacientes con diabetes inadecuadamente controlada y un IMC mayor de 30. El desafío para el equipo multidisciplinar del paciente con diabetes tipo 2 consiste en seleccionar la mejor herramienta médica y/o quirúrgica que produzca el beneficio metabólico deseado en un momento dado de la evolución de la enfermedad del paciente y con una relación riesgo-beneficio favorable.

Existen una serie de condiciones o factores predictivos del éxito quirúrgico como son el tipo de técnica quirúrgica empleada, la pérdida de peso lograda con la cirugía y la reserva celular de células beta en el páncreas (células productoras de insulina).

“Conseguiremos mejores resultados tras la cirugía metabólica en los siguientes casos: pacientes con diabetes de corta evolución (menos de 5 años); pacientes obesos que, tras ser intervenidos, tienen una pérdida de peso más relevante; y pacientes obesos y diabéticos sometidos a una técnica malabsortiva (técnicas quirúrgicas en las que se modifica el transito de la comida consiguiendo una llegada más rápida del alimento a la parte final del intestino delgado. Esto produce no sólo una menor absorción de las calorías con la consiguiente pérdida de peso sino también una serie de cambios metabólicos que, entre otras cosas, produce un aumento en la síntesis y liberación de insulina por el páncreas). Logrando un correcto control del nivel de azúcar en sangre se reducen las complicaciones cardíacas, vasculares, renales y oftalmológicas, que se producen derivadas de la diabetes. Todo ello proporciona una mejor calidad de vida y supervivencia de los pacientes diabéticos tipo 2”, concluye el Dr. Diez-Caballero.